Según el principio evolutivo, cada época desarrolla un tipo de organización apropiada a las caracterÃsticas que se dan.
En las próximas décadas el futuro es incierto, más aún agravado con la crisis mundial que se está llevando, pero a eso hay que añadirle un sinnúmero de variables, cambios y transformaciones cargadas de ambigüedad e incertidumbre cada vez más complejos.
Los principales desafÃos para gestionar una pyme serán:
- Crecimiento de la organización, empresa o pyme. Las empresas, cuando tienen éxito, crecen y amplÃan sus actividades o su radio de actuación, de ahà que sea cada vez más necesaria la coordinación y comunicación de varias partes responsables asà como el delegar responsabilidad en otras personas, cosa que, a veces, es bastante complicado.
- Competencia más aguda y agresiva entre las pymes. Es ley de vida que, cuando pones una pyme novedosa y ésta tiene éxito, lo más lógico es que comiencen a copiarte y a intentar hacer lo mismo que tu haces pero añadiendo algo más para distinguirse de tÃ. Además, a eso hay que unirle las prácticas de meter espÃas en las pymes para robar las ideas, etc.
- Sofisticación de la tecnologÃa, lo que permite que las tareas y actividades se hagan más rápidamente y haya menos que hacer por los humanos que podrán ocuparse de otras tareas o bien trabajar con menor personal.
- Internacionalización de los negocios. Esto es que las pymes hoy en dÃa no tiene un radio de actuación solamente de España o de la ciudad donde se dan, muchas de ellas trabajan ofreciendo servicios para todo el mundo.
- Tasas elevadas de inflación, lo que exige una mayor eficiencia administrativa para mantener la productividad.
- Visibilidad mayor de sus organizaciones. Conforme una pyme es conocida aumenta su visibilidad y también aumenta su forma de ser vista, si es buena o no, si respeta las normas, si es legal, etc.
- Cambios rápidos y bruscos.